Nuestros malos resultados como país y como región

A veces se piensa que nuestros malos resultados, como país, como región, son productos de malos gobiernos, de la mala educación, de la mala salud y alimentación; estos, son factores importantes, sin duda alguna, pero malos presidentes creo que han tenido todos los países, guerras, hambre, pestes.

Educación es un factor importante, pero gente analfabeta ha existido en los ahora países industrializados, los profesionales bolivianos y latino americanos en general están al nivel de cualquier profesional extranjero, los avances técnicos están disponibles a los días de haber salido; los libros, las nuevas formas de gestión y de administración se encuentran disponibles al instante, prueba de ellos, mucha gente que estudio en grandes países trabajan aquí y todo sigue igual, muchos que estudiaron aquí, se van allá y esos países siguen avanzando y avanzando.

A continuación les presento una imagen del mundo, señalando en verde a los países miembros del G8, los países mas industrializados del mundo, ¿en donde están esos países? en el hemisferio norte, y no es cuestión de raza, por que mongoles, sajones, galos, arios, etruscos y diversas mezclas y migraciones pueblan esos países.

Entonces, ¿por qué estamos donde estamos y los otros están donde están?

Por la ACTITUD, el estadounidense Gordon Allport definió la actitud como un estado de disposición nerviosa y mental, organizado mediante la experiencia, que ejerce un influjo dinámico u orientador sobre las respuestas que un individuo da a todos los objetos y situaciones con los que guarda relación. En este sentido, puede considerarse la actitud como cierta forma de motivación social -de carácter, por tanto, secundario, frente a la motivación biológica, de tipo primario- que impulsa y orienta la acción hacia determinados objetivos y metas.

Mientras nosotros premiamos la viveza, los países ricos la condenan, premian la inteligencia, a quien se esfuerza, a quien cumple la norma.

¿Como revertimos la situación? Cambiando nosotros mismos, criando a nuestros hijos con otra actitud, así con suerte, en 20 años, podremos cambiar y empezar a progresar.